viernes, noviembre 25, 2005

Algo en el ambiente

Ayer, algo pasaba. Así me confirmaron las personas con las que hallaba similitud a mi estado.

Era como ver desvanecer esa luz que suele ser tan intensa en la cúspide del precipicio, por donde entraba aire y llenaba mis pulmones de vida, cada instante que quisiera tomarla.


Las situaciones normalmente emocionantes que suceden en la mente y se tornan ensordecedoras luego de imaginarlas sin afirmar ningún camino ni algún motivo para continuar, ni un gramo de viento, todo está quieto; sólo me quedo de pie, sin mover mis piernas, viendo a un lado y al otro sin saber la razón por la cual vine por el camino que podría haber sido por donde debía continuar.

Hay lapsos en que siento espasmos y son la puerta a una imitable realidad en donde aún hay mariposas que respiran presurosas ese aire que a mí me falta. Ladronas!

Cada momento q transcurre, confirmo mi hipótesis... los sentimientos han salido a bailar desde ayer, y no sé cuanto tiempo más sigan confundidos creyendo que pueden venir a alborotarnos sin previo aviso.

De cualquier manera, tal vez deba abrir los ojos y ver mi monitor.

El de hoy sí está cargado, y no creo que el agua sea suficiente para aligerarlo.