domingo, marzo 06, 2005

El comienzo de la duda

Primero, sospechas...
Te alimentas de detalles insignificantes para muchos, pero important�simos para t�.
Comentarios van, comentarios vienen; y ellos te ayudan a formar un nuevo pilar de angustias bajo el cual se sostendr�n muchas incertidumbres posteriores.
Las actitudes injuriosas que el mundo te demuestra, te hacen dudar de tu seguridad y te preguntas: pero si antes yo era quien estaba tranquila, yo era quien me re�a, antes yo era quien estaba c�moda; ahora todo ha cambiado.
La indignaci�n dura hasta siempre. Ir�nicamente, combinas palabras peyorativas que hasta se tornan jocosas. Pero prefieres dormir, al final, no hay nada que una buena noche de descanso no pueda solucionar, no?
Al d�a siguiente sientes paz, no te quieres levantar, no quieres mover ni un dedo por las continuas ambig�edades que a�n te faltan por descifrar.

Observas intentos fallidos de conversaciones. Te tomas 5 segundos para pensarlo.
- Hola...
Podr�a hablarlo todo? Podr�a decirlo a medias? Debo sencillamente callar?
NO! No callar�.
Lo he intentado antes y hoy no hay rastros de aquellos seres.
A medias? creo que tampoco. Tambi�n lo intent� en algunas ocasiones pero s�lo era un gigante dormido.
Lo dir� todo! Todo! No optar� por guardarme nada. Pues no se debe, no se puede, no se quiere. Aunque me sienta el alicate que corta el eslab�n de la cadena relativamente perpetua, pues estoy opinando contra su mundo, contra su todo, contra su vida.
............
Un momento, su mundo?, su todo? su vida?
Donde he escuchado eso antes......